Tragedia y dolor en Texas: las crecidas provocan al menos 70 fallecidos, incluyendo 21 menores, y numerosos desaparecidos.
Publicado: 06-07-2025
Una subida de ocho metros del río Guadalupe devastó un campamento de verano para niñas, de las cuales unas diez siguen sin ser encontradas.
Las lluvias golpearon con una intensidad arrasadora. En la madrugada del viernes, el cielo desató en pocas horas una cantidad de agua equivalente a casi la mitad de la precipitación anual del condado de Kerr, en el centro-sur de Texas. Las inundaciones dejaron un saldo provisional de al menos 70 fallecidos, incluyendo 21 niños, y numerosas personas desaparecidas, según informaron las autoridades locales. Este desastre, sin precedentes en el último siglo en esta región rural a unos 100 kilómetros de San Antonio, afectó un campamento de verano que albergaba a 750 niñas. Una de ellas perdió la vida y una decena aún no han sido localizadas.El grupo de menores fue sorprendido por las precipitaciones mientras disfrutaban de unos días en Camp Mystic, ubicado a orillas del río Guadalupe. El río se desbordó tras una súbita crecida de ocho metros en menos de una hora. La madre de Janie Hunt, de nueve años, confirmó a CNN este sábado por la mañana que su hija fue encontrada sin vida. Horas antes, había expresado su esperanza de hallarla con vida. Los padres de las demás niñas desaparecidas comenzaron a compartir fotos en redes sociales, buscando cualquier pista sobre su paradero.
Las autoridades activaron de inmediato un operativo de búsqueda a gran escala. “Haremos todo lo que esté a nuestro alcance [para encontrarlas], revisando cada árbol, levantando cada piedra, lo que haga falta”, aseguró el vicegobernador de Texas, Dan Patrick, dirigiéndose a las familias de las menores.El campamento Mystic albergaba a 750 niñas. Su página web lo presenta como un espacio “cristiano” y “saludable”, donde las pequeñas “desarrollan habilidades” y se transforman en “mejores personas”. El lugar quedó arrasado tras las inundaciones. Más de cien guardabosques lograron acceder al campamento desde la madrugada del viernes para asistir a los afectados, iniciando los rescates después del mediodía.Las tormentas, calificadas como “catastróficas”, han dejado un saldo provisional de más de 30 fallecidos. El sheriff local, Larry Leitha, informó que al menos 24 de estas víctimas murieron en el condado de Kerr, y una en el vecino condado de Kendall. El general mayor Thomas Suelzer, líder de la Guardia Nacional de Texas, confirmó que los equipos de rescate trabajaron sin descanso durante la noche del sábado, logrando evacuar a más de 850 personas de las zonas inundadas. La mayoría fueron trasladadas en helicóptero, aunque también se desplegaron equipos de nadadores especializados. El congresista Chip Roy, representante del distrito, indicó que alrededor de 1.000 efectivos locales, estatales y federales participan en las labores de búsqueda.