ASESINATO DE EZEQUIEL AGREST: PANTANO FUE CONDENADO A 23 AÑOS DE PRISION
Publicado: 31-05-2013
Sebastian Pantano fue condenado hoy a 23 años de prisión por el crimen del estudiante de cine Ezequiel Agrest, asesinado de un balazo durante un asalto cometido en 2011 en el barrio porteño de Caballito.
El abogado de la querella, Carlos Pousa Bogado, informó que el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 18 aplicó esa pena por el crimen del hijo de la filósofa Diana Cohen Agrest, al unificarla con la de otro caso de robo por la que ya cumplía 5 años de cárcel.
El pedido de unificación de la condena había sido solicitado ante el TOC 18 por el fiscal Aldo De la Fuente, durante una audiencia oral el último 22 de mayo, para que el confeso asesino reciba una pena única de 25 años de cárcel.
En tanto que la querella que representa a la madre de Agrest, pidió a los jueces que se condene al acusado a una pena única de 30 años de cárcel, en la que se unifican los 5 años de la condena por el robo de Morón y 25 por el homicidio del muchacho.
Por su parte, la defensa de Pantano había solicitado una pena de 11 años de cárcel, dijeron las fuentes.
Pantano había sido condenado el 16 de abril de 2012 por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 28 a la pena de prisión perpetua «por robo calificado, portación ilegal de arma de fuego y homicidio criminis causa», tal como habían pedido la fiscalía y la querella, al considerar que mató para lograr la impunidad en el robo.
Pero el 14 de mayo pasado, la sala III de la Cámara Federal de Casación Penal, integrada por Alejandro Slokar, Angela Ledesma y Ana María Figueroa, entendió que se trató de un «homicidio en ocasión de robo».
Por tal motivo, ordenó que un nuevo tribunal oral fije un nuevo monto de pena en base a ese delito, el cual estipula una pena de entre 10 y 25 años de cárcel.
El crimen ocurrió el 8 de julio de 2011 en el pasaje Bertrés al 500, casi Pedro Goyena, de Caballito, donde vivía Lucía Agosta, una compañera de Agrest, cuando ambos fueron sorprendidos por un joven que ingresó a robar cuando bajaban cosas de un auto.
Pantano, hijo de un Policía Federal, fue detenido un mes después en la localidad bonaerense de Lomas de Zamora con un DNI falso.
La clave para hallar al sospechoso fue que en el lugar del hecho había olvidado una mochila que contenía su currículum con datos personales, el cual, según la madre de Ezequiel, era utilizado en caso de que la Policía lo detuviera por merodear alguna zona y lo presentaba para que pareciera que estaba buscando trabajo.
Durante el juicio oral desarrollado en el 2012 ya había habido diferencias entre los jueces -en minoría Luis Márquez votó por «homicidio en ocasión de robo»- mientras que el imputado confesó ser el autor del crimen pero dijo que se le «fue la mano» y que el disparo fue «accidental».