Domingo 02 de Noviembre de 2025

Desarticulado un plan de masacre escolar en Buenos Aires: Adolescente de 16 años detenido tras alerta del FBI

Publicado: 02-11-2025

En un operativo conjunto que involucró a autoridades argentinas y estadounidenses, la Policía Federal Argentina (PFA) frustró lo que podría haber sido un ataque masivo en un colegio de la Ciudad de Buenos Aires. El sospechoso, un adolescente de 16 años residente en el barrio de Caballito, fue detenido este fin de semana tras un allanamiento en su domicilio, donde se encontraron elementos que simulaban un arsenal letal y un plan detallado para perpetrar una «masacre escolar». La investigación se activó gracias a una alerta del FBI, que detectó amenazas en redes sociales.

El caso, que ha conmocionado a la comunidad educativa porteña, revela patrones preocupantes de radicalización en línea y admiración por figuras extremistas. Fuentes judiciales confirmaron que el joven, quien mostraba una «marcada admiración por el régimen nacionalsocialista nazi» y glorificaba a autores de tiroteos masivos, había esbozado un esquema de ataque previsto para este mes de noviembre. «Era un plan meticuloso, con distracciones y tácticas para maximizar el daño», indicaron investigadores de la PFA, que supervisaron el operativo bajo la órbita del Ministerio de Seguridad Nacional.

El origen de la amenaza: Una pista digital desde Estados Unidos

Todo comenzó con un informe remitido por el FBI a la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI), a cargo del fiscal Horacio Azzolin. El bureau estadounidense identificó a un usuario en una red social que expresaba abiertamente su intención de llevar a cabo un tiroteo en una escuela. «El reporte del FBI fue clave; sin esa colaboración internacional, el plan podría haber avanzado sin detección», explicó un portavoz de la UFECI, destacando la importancia de la vigilancia cibernética en la era digital.

La PFA, a través de su Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista (DUIA), tomó las riendas de la pesquisa. En cuestión de días, los agentes rastrearon la IP y el perfil del usuario hasta un domicilio en la avenida Juan Bautista Alberdi, en pleno corazón de Caballito. El adolescente, descrito como un estudiante aislado con intereses en ideologías extremas, no levantó sospechas inmediatas entre sus vecinos, pero sus publicaciones en línea lo delataron.

El allanamiento: Un «arsenal» de réplicas y un manifiesto escalofriante

Con una orden librada por la jueza federal María Romilda Servini, los efectivos de la PFA irrumpieron en la vivienda el sábado por la mañana. Lo que encontraron superó las peores expectativas: varias réplicas de armas de fuego –incluidas pistolas, un revólver y un subfusil–, dos cuchillos afilados, municiones falsas, un spray de gas pimienta y botellas preparadas como cócteles Molotov. Pero el hallazgo más perturbador fue una réplica del subfusil, grabada con los nombres de notorios atacantes múltiples: Brenton Tarrant, responsable de la masacre de Christchurch en Nueva Zelanda; Anders Breivik, autor del atentado en Noruega en 2011; y Rafael Solich, conocido como «Pan Triste», quien en 2002 protagonizó la tragedia en la escuela de Carmen de Patagones, en la provincia de Buenos Aires.

Entre los objetos secuestrados también figuraba una «carta de despedida» que sugería intenciones suicidas, y un documento escrito a mano donde el joven detallaba su estrategia de ataque. Según el escrito, el plan iniciaba con una amenaza falsa en un shopping cercano al colegio objetivo –ubicado en el mismo barrio de Caballito– para generar caos y desviar la atención de las fuerzas de seguridad. Una vez lograda la distracción, el adolescente ingresaría al establecimiento disfrazado de policía, aislaría a los alumnos en las aulas y procedería al tiroteo indiscriminado. «Simularía una inspección rutinaria para ganar tiempo y acceso», rezaba parte del texto, que glorificaba la violencia como un «acto de purificación».

El colegio no ha sido identificado públicamente para evitar pánico, pero fuentes cercanas a la investigación confirmaron que se trata de una institución secundaria estatal en la zona. «Estamos trabajando con la escuela para reforzar protocolos de seguridad, pero lo primordial es la contención emocional para alumnos y docentes», declaró un funcionario del Ministerio de Educación porteño, quien solicitó anonimato.

Detención y próximos pasos: ¿Radicalización o grito de auxilio?

El adolescente fue detenido en el lugar y quedó a disposición de la Justicia. La causa fue caratulada como «Intimidación pública», un delito que contempla penas de hasta ocho años de prisión para mayores, aunque su edad lo somete al régimen de responsabilidad penal juvenil. Inmediatamente, la jueza Servini ordenó su traslado al Cuerpo Médico Forense para una evaluación psiquiátrica integral, que determinará si factores como depresión, trastornos mentales o influencia de contenidos tóxicos en internet jugaron un rol en su conducta.

Expertos en ciberseguridad y psicología forense consultados por este medio advierten sobre el auge de estos casos en América Latina. «La glorificación de masacres en foros oscuros y redes sociales es un fenómeno global, pero en Argentina resuena con ecos locales como el de Patagones», señaló la psicóloga especializada en violencia juvenil, Laura Gómez. Organizaciones como la ONG «Ni Una Menos» y el Observatorio de Violencia contra las Mujeres ya han emitido comunicados exigiendo mayor inversión en salud mental escolar.

Este incidente no es aislado: en los últimos años, alertas similares han surgido en colegios de Córdoba y Rosario, siempre vinculadas a perfiles radicalizados en línea. La colaboración entre el FBI y la PFA, en este caso, ejemplifica un modelo de inteligencia compartida que podría replicarse para prevenir tragedias mayores.

Mientras la comunidad de Caballito procesa el shock, las autoridades llaman a la vigilancia parental y al reporte inmediato de señales de alerta. «Una publicación, un comentario: puede ser la pista que salve vidas», concluyó el fiscal Azzolin en un breve despacho. El barrio, conocido por su tranquilidad, despierta hoy con una lección amarga: la amenaza del terror puede acechar en la puerta de al lado.