«EL ADN, LAS LESIONES, EL ABUSO SEXUAL Y LA ALEVOSIA», EL ANALISIS

Para los Sres Camaristas  Mario Filozof, Julio Lucini y Ricardo Pinto, obran en la causa prueba suficiente para tener acreditada, a esta altura de la investigación, la autoría de Jorge Mangeri en el homicidio de Ángeles Rawson. 

. Hay hallazgo de material biológico del imputado en el cuerpo de la occisa y en una de las sogas que rodeaba sus tobillos, esa información genética sobre el imputado resulta llamativo y configura un indicador más a ponderar de manera incriminante. 

. Las características de las 32 lesiones halladas en el cuerpo de Mangeri no se compadecen con las que tendría producto de los apremios por él oportunamente denunciados y ratificados en las indagatorias que habrían consistido en golpes en la nuca y en su rostro y quemaduras. Sin perjuicio de que su denuncia es materia de investigación en otro sumario. 

. Sobre el abuso sexual no hay determinación en la propuesta efectuada en el marco de la audiencia oral por las novedades de otros delitos que sustituyan la agravante del art.80 inc.2° del código de fondo (el penal), impuesta en el auto de mérito apelado, es indudable que esta instancia no está en condiciones de abordar la cuestión ya que las nuevas circunstancias no están comprendidas en las intimaciones formuladas a Mangeri al ser indagado y su corroboración dependerá, en gran medida, del resultado de los exámenes médicos aún en trámite. 

. Sobre el aparente beneficio a la imputación a Mangeri  es producto que el ADN del imputado -en mayor o menor concentración según las zonas- fue hallado en tres dedos de la mano derecha del cadáver y en una de las sogas que rodeaba sus tobillos, es relevante pues permite concluir provisoriamente que una de las últimas acciones de la chica fue defenderse del ataque de su agresor y, de ese modo, se habría producido la transferencia del material genético encontrado, posteriormente, en el cadáver