La derrota electoral en Buenos Aires sacude al Gobierno de Milei: “Los resultados macroeconómicos no llegan a la gente”
Publicado: 08-09-2025

El Gobierno de Javier Milei enfrenta un momento de introspección tras la contundente derrota de La Libertad Avanza (LLA) en las elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires, donde el peronismo, liderado por Fuerza Patria, se impuso con una diferencia de más de 13 puntos, pintando el mapa provincial de celeste. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, admitió en diálogo con Radio Mitre que los logros macroeconómicos del Gobierno no están llegando «al metro cuadrado» de la gente, un reconocimiento que pone en evidencia la brecha entre las políticas oficiales y la percepción ciudadana. «Es importante que el crecimiento económico llegue a la gente, sino miran con desconfianza ciertos logros», señaló Francos, subrayando la necesidad de una autocrítica tras el revés electoral.
Un revés inesperado y sus ecos internacionales
La derrota en Buenos Aires, un bastión electoral clave, superó los pronósticos del oficialismo, que esperaba un resultado más ajustado en alianza con el PRO. La Libertad Avanza perdió en seis de las ocho secciones electorales, incluidas la Primera y la Tercera, las más pobladas. Medios internacionales como La Repubblica (Italia) destacaron que «el partido de Milei sufre una derrota mientras los peronistas ganan las elecciones provinciales de Buenos Aires», señalando el contexto complicado para el Gobierno, agravado por el escándalo de presuntas coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). Por su parte, El País (Uruguay) calificó el resultado como «contundente» y «más duro de lo esperado», mientras que O Globo (Brasil) resaltó el compromiso de Milei de «acelerar reformas» pese al traspié.
El presidente Milei, en un discurso desde el búnker de LLA en La Plata, asumió la derrota con un tono autocrítico: «Sin dudas en el plano político hoy hemos tenido una clara derrota. Hay que aceptar los resultados y corregir lo que nos hayamos equivocado». Este lunes, el mandatario convocó a una reunión de Gabinete en la Casa Rosada a las 09:30 para analizar el resultado y replantear la estrategia de cara a las elecciones nacionales de octubre, cruciales para fortalecer la representación parlamentaria del oficialismo.
Impacto en los mercados y críticas internas
El revés electoral no solo tuvo consecuencias políticas, sino también económicas. Las acciones argentinas en el premarket de Wall Street cayeron hasta un 15%, con retrocesos significativos en empresas como Grupo Galicia (-15,21%) y YPF (-11,29%). Los bonos soberanos también sufrieron bajas de hasta un 7,77%, reflejando la incertidumbre generada por el resultado. Un informe de la consultora 1816 señaló que el mercado ajustará a la baja las probabilidades de reelección de Milei en 2027, mientras comienza a especular sobre un posible retorno del peronismo o el surgimiento de una tercera fuerza.
En el plano político, el Gobierno enfrenta tensiones internas y externas. Francos vinculó la derrota con maniobras preelectorales de la oposición, particularmente del kirchnerismo, que habría capitalizado el contexto para movilizar su base. Además, el escándalo de ANDIS, con la destitución de Diego Spagnuolo tras la filtración de audios que sugieren coimas, añadió presión al oficialismo. Francos defendió al Gobierno, calificando las acusaciones como una «operación política» y asegurando que la Justicia investigará el caso. Sin embargo, reconoció que el Presidente «no debió haber confiado» en Spagnuolo, un habitual en las cenas de Olivos.
Desafíos hacia las elecciones nacionales
Con las elecciones legislativas nacionales programadas para el 26 de octubre, el Gobierno enfrenta el desafío de recomponer su imagen y conectar con un electorado que, según analistas, expresó un «voto castigo» en Buenos Aires. La implementación de la Boleta Única de Papel y la intensificación de la campaña electoral a partir del 21 de septiembre serán clave para el oficialismo, que necesita sumar escaños en el Congreso para impulsar sus reformas. Francos había anticipado previamente que el objetivo es superar el 40% de los votos a nivel nacional, aunque la derrota bonaerense pone en duda esa meta.
El analista Carlos Maslaton, en un análisis para Infobae, advirtió que el resultado en Buenos Aires podría complicar las chances de LLA en octubre: «Es raro el argumento del Gobierno de que en octubre les va a ir bien teniendo un resultado negativo hoy, eso generalmente no pasa». Por su parte, el peronismo, con Axel Kicillof como figura destacada, emerge fortalecido, consolidándose como una oposición sólida.
Hacia una autocrítica y recomposición
El Gobierno de Milei, que hasta ahora había evitado derrotas electorales significativas, se encuentra en un punto de inflexión. La reunión de Gabinete de este lunes será crucial para definir los próximos pasos, en un contexto donde la gobernabilidad y la estabilidad económica están en juego. Francos insistió en la necesidad de revisar por qué los logros macroeconómicos, como la reducción de la deuda pública en 34 mil millones de dólares desde la asunción, no se reflejan en la calidad de vida de los ciudadanos.
Mientras el oficialismo busca recomponer su relación con aliados como el PRO y ajustar su estrategia, la oposición capitaliza el descontento social. Con un mes por delante hasta las elecciones nacionales, el Gobierno de Milei deberá demostrar que puede cerrar la brecha entre sus políticas y las necesidades de la gente, en un escenario político cada vez más competitivo.