Nueva pista en Paraguay reaviva la esperanza en la desaparición de Marita Verón: Fotos de una mujer indigente generan conmoción
Publicado: 07-11-2025

Han pasado 23 años desde que Marita Verón, una joven tucumana de 23 años, desapareció en las calles de San Miguel de Tucumán, pero una pista proveniente de Paraguay ha vuelto a encender la llama de la incertidumbre y la esperanza en su familia. Vecinos de la ciudad de Capiatá, a 23 kilómetros de Asunción, alertaron a Susana Trimarco, madre de la víctima y fundadora de la Fundación María de los Ángeles, sobre una mujer en situación de extrema vulnerabilidad que podría ser su hija. Imágenes desgarradoras de la indigente, compartidas con Trimarco, han sacudido el corazón de la activista, quien no descarta ninguna posibilidad en esta interminable búsqueda.
La denuncia surgió de un grupo de vecinos del barrio San Ramón, en la Ruta PY02 de Capiatá, donde la mujer vivía en una precaria ranchada cubierta por una lona, sobreviviendo de la caridad ajena. Según relatos de los testigos, la persona en cuestión es argentina, habla un español fluido con leves influencias del guaraní, padece problemas de salud mental y muestra signos evidentes de desnutrición extrema. «Doña Eva», como se hacía llamar, deambulaba por la zona de la ex Ruta 1, un área conocida por la presencia de personas en situación de calle, muchas de ellas con adicciones o dedicadas a tareas como limpiaparabrisas. Enrique, un colaborador del portal local Capiatápress, confirmó a Infobae que en ese sector es común encontrar mujeres en condiciones similares, pero esta vez el parecido con las fotos de Marita alertó a la comunidad.
El 21 de octubre, las autoridades paraguayas le expidieron un documento provisional a la mujer, identificándola como Eva M., nacida el 3 de junio de 1955 en San Pedro del Paraná, departamento de Itapúa. Sin embargo, esta identificación preliminar no ha disipado las dudas, ya que la falta de documentos originales y su estado de salud han complicado cualquier verificación inmediata. Las fotografías enviadas a Trimarco muestran a una figura avejentada y demacrada, acurrucada en su improvisado refugio, con la piel marcada por el sol y la miseria. «Es como que me clavaron un puñal en el pecho», confesó Trimarco en una entrevista reciente, visiblemente afectada. «No pude dormir. Me mandaron una foto que no la quiero presentar, porque es horrorosa la situación de esa mujer. Estoy muy afectada yo con esto. Con solo pensar en la situación en que supuestamente está mi hija…». La activista, quien ha dedicado su vida a combatir la trata de personas, reveló que el impacto emocional le provocó un derrame en el ojo y un pico de presión arterial. «Mientras yo con la fundación ayudo a miles de mujeres, supuestamente mi hija está como una persona indigente», agregó con voz quebrada.
Esta no es la primera vez que una pista remota genera revuelo en la causa Verón. En años anteriores, surgieron rumores de que Marita había sido vista en Córdoba o La Pampa, e incluso enterrada en un cementerio tucumano tras un presunto homicidio. «No es la primera vez ni la última, es todo el tiempo», minimizó un cercano al entorno de Trimarco, aunque enfatizó la necesidad de investigar cada lead. Fuentes judiciales consultadas por Infobae advirtieron sobre la cautela: «Esos datos llegan así cada tanto y todo se comprueba, hasta lo más inverosímil. No me llevaría por una imagen de una persona en situación de calle y visiblemente avejentada, pero sí está claro que hay que darle intervención a las redes de fiscales de Trata por medio de la Protex».
La información ya fue remitida a la Fiscalía Federal N°2 de Tucumán, a cargo del fiscal José Agustín Chit, quien el jueves pasado activó los protocolos internacionales. Se están coordinando esfuerzos con el Ministerio Público Fiscal de Paraguay para realizar pruebas de ADN y otras pericias. La Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex) jugará un rol clave en esta articulación binacional, uniendo fuerzas contra una red que, según testimonios históricos, podría haber traficado a Marita hacia whiskerías en La Rioja, Córdoba, Santa Fe, Santa Cruz e incluso España.
El fantasma de 2002: Un secuestro que conmovió a Argentina
El caso de Marita Verón sigue siendo uno de los emblemas de la lucha contra la trata en Latinoamérica. El 3 de abril de 2002, la joven salió de su hogar en San Miguel de Tucumán rumbo a la maternidad Nuestra Señora de las Mercedes para solicitar un turno ginecológico. Nunca regresó. Horas después, un testigo ocular alertó a la policía: Marita había sido vista siendo introducida a la fuerza en un Fiat Duna rojo con vidrios polarizados, perteneciente a la remisería Cinco Estrellas, ligada a la familia Alé –condenados en 2010 por su rol en el secuestro, aunque absueltos en apelación por falta de pruebas concluyentes sobre la trata.
Testimonios posteriores pintaron un panorama siniestro: Marita habría sido retenida en la casa de un proxeneta local, vendida por 2.500 pesos a un burdel en La Rioja apenas dos días después, y luego desplazada por una red de explotación sexual que cruzaba fronteras provinciales y nacionales. A pesar de múltiples allanamientos y declaraciones, el paradero de Marita permanece en la niebla. Fotos de archivo adjuntas al artículo muestran a una Trimarco radiante junto a su hija al egresar del secundario, un recordatorio cruel de la vida truncada.
La pista paraguaya, surgida de redes sociales locales y un mensaje directo de una vecina anónima, se viralizó rápidamente en grupos de Capiatá antes de llegar al celular de Trimarco. Mientras la Justicia avanza en los trámites, la madre de Marita apela a la solidaridad pública: «Hay que investigar todo, esa es la realidad». En un país donde miles de mujeres desaparecen cada año, el caso Verón no solo es una herida abierta, sino un llamado eterno a no bajar la guardia.
Por ahora, «Doña Eva» permanece bajo observación en Paraguay, mientras la esperanza –frágil como una lona en el viento– se resiste a extinguirse. La Fundación María de los Ángeles, con sede en Tucumán, continúa recibiendo denuncias y brindando apoyo a víctimas de trata. Cualquiera con información sobre Marita puede contactar al 0800-222-1717.