Para la gobernadora Alicia Kirchner, el reclamo «fue un ataque planificado»
Publicado: 22-04-2017
La gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, sostuvo que la manifestación de trabajadores estatales que reclamaban sueldos frente a su residencia oficial «fue un ataque planificado» y admitió que hay «una sobredimensión de la planta de personal».
«Me llama la atención» la protesta, dijo esta mañana Kirchner en declaraciones radiales y volvió a cargar culpas hacia la prensa al señalar que existe «permanente a nivel mediático la visita de distintos medios pero no para ayudar a los santacruceños».
La ex ministra de Desarrollo durante los 12 años de kirchnerismo, negó que haya ordenado reprimir la protesta y apuntó contra el diputado nacional por Cambiemos Eduardo Costa, a quien calificó como un dirigente de la «obstrucción o de la destrucción»
Kirchner consideró que la provincia se encuentra en «un momento crítico», pero evaluó que acciones como las que ocurrieron anoche «no conducen a nada» y sostuvo que al momento de los incidentes en la residencia, que estaba custodiada por la policía provincial y la guardia de infantería, había «cinco mujeres solas y un bebé de 18 meses».
La mandataria provincial también reveló que la ex presidenta «está absolutamente preocupada y se da cuenta muy bien de qué han querido hacer» durante las protestas de esta madrugada. «Yo me tomé el compromiso de ayudar a la gente, otros están instigando: le quieren hacer creer a la gente que tenemos ingresos, que tenemos plata, que no les pagamos porque no queremos», sentenció Kirchner, quien a la vez planteó: «¿Les parece que soy tan mala política que si tengo el dinero para pagar los sueldos no los voy a pagar?».
La policía de Santa Cruz reprimió en las primeras horas de hoy con gases lacrimógenos y balas de goma a un grupo de manifestantes que protestaba frente a la residencia de la gobernadora Alicia y al menos cuatro personas resultaron heridas.
En ese marco, el reportero gráfico Jorge Riquelme recibió un fuerte golpe en la cabeza y un trabajador estatal recibió 10 impactos de bala de goma en su espalda.
El inicio de la represión se produjo cuando un grupo de manifestantes abrió el portón de la residencia custodiada por policías e ingresó a los jardines internos para golpear la puerta principal y ventanas del edificio mientras la gobernadora se encontraba en su interior junto a la ex presidenta Cristina Fernández