En una serie que quedará para la historia, Inter venció a Barcelona y se metió a la final de la Champions League
Publicado: 06-05-2025
Una sola frase resume lo que ocurrió en Italia: bendita Champions League. Tras el 3-3 en la ida, el Inter le ganó 4-3 al Barcelona en el Giuseppe Meazza y se metió en la final en una noche inolvidable. Los goles de la heroica clasificación los marcaron Lautaro Martínez, Calhanoglu de penal, Acerbi y Frattesi. Los catalanes, que coqueteó con la hazaña, respondió con tantos de Eric García, Dani Olmo y Raphinha.
Fue un duelo no apto para cardíacos. El Neroazzurro salió a imponer condiciones desde el inicio: agresivo, intenso, con una presión alta que desdibujó por completo al Barça. A los 20 minutos, Lautaro rompió el cero tras una gran jugada colectiva, y en la última de la primera parte, un polémico penal sancionado vía VAR sobre el propio Toro fue transformado en gol por Calhanoglu. El 2-0 parecía lapidario.
Pero en el complemento cambió todo. El Inter se replegó, cedió la iniciativa y el Barcelona lo aprovechó. En apenas 15 minutos, Eric García y Dani Olmo empataron con dos golazos que enmudecieron el Meazza. Los de Hansi Flick fueron por el tercero, pero se toparon con un Sommer monumental, que sostuvo el empate con dos atajadas espectaculares. Resistió hasta donde pudo. A los 87, un rebote le cayó a Raphinha, que no perdonó y desató el delirio culé, para festejar lo que parecía el boleto a la final garantizado.
Pero la Champions, como siempre, tenía un capítulo más. A los 93, Francesco Acerbi apareció como un nueve y empujó la serie al alargue. Y el envión anímico hizo el resto. A los 8 del tiempo extra, cuando las piernas ya pesaban, Davide Frattesi marcó un gol con una sutileza que desató la locura. Su celebración fue tan eufórica que terminó sin aire, como el resto de sus compañeros.
Después de 13 goles que quedarán en la historia, el árbitro marcó el final cuando el reloj marcaba los 120. Los jugadores se desplomaron: unos, devastados por haber rozado la hazaña; otros, incrédulos por la victoria. El Inter está en la final. Espera en el Allianz Arena de Múnich por Arsenal o Paris Saint-Germain, donde irá por la gloria.