Massa apuesta al dólar tecno y al cepo importador, pero no descarta un plan de shock o un desdoblamiento cambiario
Publicado: 03-10-2022
El ministro quiere aprovechar el colchón de dólares que logró con la soja para atravesar el fin de año. Incentivará exportaciones en sectores que provean divisas y restringirá compras de bienes, aunque podría incluir servicios como el turismo. Un programa de estabilización como el Austral de 1985 o la creación un tipo de cambio oficial más alto para ciertos productos son opciones que siguen en estudio.
La frase “vamos viendo” que tantas veces repitió Alberto Fernández en la intimidad de su gobierno, se escucha ahora de boca de los funcionarios que acompañan a Sergio Massa como ministro de Economía. “¿Harán un plan de estabilización o shock, como el Austral en 1985 o la convertibilidad en 1991?”, preguntó elDiarioAR a uno de ellos tras la conferencia de prensa de este viernes en la que Massa anunció que superó ampliamente su objetivo de liquidación de dólar soja a $ 200, al lograr US$ 8.123 millones, en lugar de 5.000 millones. “Vamos viendo”, respondió. “¿Y el desboblamiento cambiario?”, se interrogó a otro integrante del equipo económico. “Puede ser”, contestó.
Por el momento, lo seguro es que el ministro volvió a negar una devaluación del peso, que favorecería la acumulación de reservas al alentar la exportación y desincentivar la importación, pero también elevaría inicialmente la inflación aún más e incrementaría la pobreza del 36% actual al 56%, según sus propios cálculos. Una depreciación brusca es el primer paso para cualquier plan de shock en el que después se congelen por unos meses los precios del dólar, los bienes básicos, las tarifas y los salarios. En cambio, desdoblar es una devaluación encubierta pero gradual, en la que sólo algunos determinados productos y servicios pasan a regirse con un dólar más alto que el actual, a $147 el mayorista.
Este lunes comenzará a develarse parte del plan para seguir acumulando dólares en los últimos tres meses del año, después de la buena recaudación con el dólar soja, más allá de sus daños colaterales en términos de más inflación y más brecha cambiaria. Por un lado, Massa anunciará incentivos a la exportación y en particular el dólar tecno, por el que las empresas de la economía del conocimiento tendrán libre disponibilidad de parte de las divisas conseguidas con las ventas externas, similar a la ventaja que ya le concedió a la industria petrolera. Por el otro, creará un esquema que intente echar por tierra las medidas cautelares que consiguieron en la Justicia importadores para ingresar bienes que el Gobierno había frenado por considerarlos superfluos en un contexto de escasez de divisas. El ministro también negocia con el grupo Techint para que el acero importado de Brasil para elaborar aquí los tubos del gasoducto Néstor Kirchner, y que cuesta US$ 200 millones, sea financiado por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de ese país, y no sea desembolsado por la filial argentina del conglomerado de Paolo Rocca.