Este lunes comenzará a develarse parte del plan para seguir acumulando dólares en los últimos tres meses del año, después de la buena recaudación con el dólar soja, más allá de sus daños colaterales en términos de más inflación y más brecha cambiaria. Por un lado, Massa anunciará incentivos a la exportación y en particular el dólar tecno, por el que las empresas de la economía del conocimiento tendrán libre disponibilidad de parte de las divisas conseguidas con las ventas externas, similar a la ventaja que ya le concedió a la industria petrolera. Por el otro, creará un esquema que intente echar por tierra las medidas cautelares que consiguieron en la Justicia importadores para ingresar bienes que el Gobierno había frenado por considerarlos superfluos en un contexto de escasez de divisas. El ministro también negocia con el grupo Techint para que el acero importado de Brasil para elaborar aquí los tubos del gasoducto Néstor Kirchner, y que cuesta US$ 200 millones, sea financiado por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de ese país, y no sea desembolsado por la filial argentina del conglomerado de Paolo Rocca.