…UNA MUJER POLICIA ME DIJO: «VOS TENES QUE DECLARAR EN CONTRA DEL PADRASTRO. YA SABEMOS QUE FUE EL, ESTA METIDO EN LA CAMPORA» DIJO DIANA SAETTONE

«El día que nos llevaron a la Fiscalía para que presentemos las declaraciones testimoniales, una mujer policía de Homicidios me dijo: ‘Vos tenés que declarar en contra del padrastro. Ya sabemos que fue él. Es un vago, no trabaja y está metido en ‘La Cámpora». Yo les contesté que no iba a declarar en su contra, porque no sabía nada sobre Sergio Opatowski…»
Incluso, también comentó una grave frase que le dijo la doctora María Paula Asaro:
«A mí la fiscal me dijo: ‘Yo que vos no volvería a tu casa, porque la familia te va a querer matar’. Unos minutos antes me estaba pidiendo perdón».
«No lo dije porque estaba asustada. Después de las torturas que recibió mi esposo, ¿en quién puedo confiar? Fuimos a ver a la fiscal, le contamos todo lo que le había pasado a Jorge y ella le preguntó: ‘¿Por qué está tan nervioso?’. ¡¿Por qué iba a ser?! Yo vi a mi esposo todo golpeado, quemado y torturado. ¡Tenía marcas hasta en los testículos!», dijo la mujer en la revista.
Sin embargo, el doctor Marcelo Biondi, defensor de Mangeri, comentó que Saettone no estaba conforme con la publicación: «Hoy hablé con Diana a la tarde que hay cosas en la revista (Gente) que no son cómo las manifestó».
El periodista Sergio Oviedo, que además de afirmar como verdadero lo que expresó Saettone sobre el pedido de incriminación, brindó otros detalles: «Cuando estuvimos en la casa, en una entrevista de casi una hora y media, Diana contó un montón de irregularidades, como que lo vistieron a Mangeri de policía, que no la agarrara con la mano, incluso que le pusieron la gorra porque ‘tenían miedo que le pegaran’, cuando el portero ni siquiera estaba sindicado como un posible sospechoso».
En ese sentido, Oviedo dio su parecer sobre el caso: «Yo creo que está totalmente convencida, tanto ella como su mamá, por eso esta defensa tan férrea. De hecho cuando cuentan la historia de Mangeri, es muy raro que haya tenido esos diez o veinte minutos de locura. También me llama mucho la atención que la fiscal considere las contradicciones del portero y no la de la familia, o incluso de la empleada doméstica (Dominga)».